La SD Ponferradina se despidió de El Toralín por esta temporada en un partido vibrante y cargado de emoción en el césped y en la grada. El equipo encajó una derrota que acabó con las opciones de entrar en el ‘playoff’ de ascenso. Pero, por encima de ello, queda la actitud de un equipo y una afición que pelearon hasta el final y se despidieron con una ovación interminable que resume una excelente campaña.
El partido se complicó desde muy pronto. Dos desajustes defensivos permitieron al CD Leganés sumar otros tantos goles, ambos con la firma de Borja Garcés. Pero el equipo no se vino abajo y se lanzó en busca de la remontada con el respaldo de la grada. A partir de ahí, se desencadenaron ataques constantes de los blanquiazules, que fueron enlazando ocasión tras ocasión.
Pases de la muerte, córners peligrosos, centros, disparos… La Deportiva buscó con ambición y por todos los caminos el gol que le metiese en el partido. Recién superada la media hora de juego, el árbitro decretó penalti a favor de la Deportiva por una posible mano de un defensor, pero, tras revisarlo en el VAR, modificó su decisión.
Poco antes del descanso llegaron las opciones más claras de entre todas las que creó el equipo. Primero, Naranjo dispuso de un remate de cabeza en el segundo palo, pero el balón se marchó alto. Después, Riesgo tuvo que intervenir para despejar a córner un lanzamiento directo desde la esquina de Ríos Reina.
El asedio continuó en la segunda mitad. El equipo siguió cercando la portería visitante y generando peligro, pero sin fortuna. De entre todas las múltiples ocasiones para meterse en el partido, la más clara llegó en potente disparo a bocajarro de Naranjo, que impactó en el rostro de Riesgo. El portero, conmocionado por el impacto, tuvo que ser sustituido.
La Deportiva tuvo que asumir riesgos en busca del gol, pero no obtuvo premio a su esfuerzo. Ya en la recta final del partido, Naim superó a la defensa, encaró a Amir y marcó para sentenciar el partido.
A partir de ahí, llegaron momentos para el recuerdo. Pese a la decepción, el público se volcó con el equipo, no dejó de animar en los minutos finales y, ya tras el pitido final, agradeció desde la grada el esfuerzo de la Deportiva a lo largo de una temporada en la que superó con solvencia el objetivo de mantener la categoría y se ganó el derecho a pelear hasta el final por el ‘playoff’ de ascenso.